Hoy vamos a tratar de dar respuesta a todas estas cuestiones relacionadas con la técnica de la abdominoplastia.
Muchas personas se acercan a nuestra consulta preguntando, cómo pueden lograr tener un vientre plano y firme.
¿Qué es la abdominoplastia?
La abdominoplastia es un procedimiento que se utiliza para corregir los defectos del abdomen, tanto en la piel, como en la grasa y la musculatura.
El fin de esta técnica de cirugía estética es mejorar el aspecto de nuestros pacientes.
Los pacientes que se someten a este procedimiento son con frecuencia mujeres que, después de un embarazo, quieren corregir las deformidades propias de la gestación.
Se trata de una técnica para pacientes sanas, psíquicamente estables y con expectativas realistas.
Si es la mujer quien se va a someter a la abdominoplastia es preferible que no tenga pensado quedarse embarazada en el futuro.
Este tipo de operaciones no sirven para adelgazar, por tanto lo ideal es estar en el peso idóneo.
Tampoco sirve para quitar la estrías al 100%, porque sólo elimina las que están en la piel sobrante.
Importante tener en cuenta, que la cicatriz de una cesárea no interfiere en la cirugía plástica abdominal.
¿En qué consiste este tipo de intervención?
Va a depender de qué parte del abdomen queramos tratar y qué problema queremos corregir. Conocer los riesgos y contraindicaciones es importante para un correcto diagnóstico.
La parte que queremos operar debemos saber si está por encima o por debajo del ombligo, si afecta a los músculos, a la piel o si se trata de un exceso de grasa.
El paciente suele recibir anestesia general para este tipo de procedimientos.
La duración de la cirugía oscila entre las dos y las cinco horas.
El tiempo de hospitalización suele ser de dos días.
Como cualquier operación la marca o cicatriz existirá, variando de localización o tamaño. Suele ser como el círculo que rodea al ombligo.
La marca que quedará a cada paciente va a depender de su capacidad cicatricial.
Tipos de abdominoplastia
Los procedimientos que se realizan al paciente en la pared abdominal son valorados por nuestro equipo de cirujanos, valorando las ventajas e inconvenientes.
Entre ellos encontramos:
- Liposucción: se lleva a cabo cuando el paciente presenta sólo un exceso de grasa en el abdomen, y el músculo y la piel están bien.
- Miniabdominoplastia sin diserción umbilical: cuando hay un leve exceso de piel y grasa por debajo del ombligo se practica la cirugía plástica abdominal. El ombligo no se toca.
- Miniabdominoplastia con diserción umbilical: indicada para pacientes similares al anterior que tiene exceso moderado de piel en la región que está por encima de la región umbilical.
- Abdominoplastia con cicatriz vertical: cuando hay un exceso mayor de piel, se separa el ombligo de la piel, la resecan y se saca de nuevo el ombligo. La cicatriz es vertical y queda por encima de la zona.
- Abdominoplastia en flor de Lys: sólo se practica cuando sobra demasiada piel.
- Abdominmosplastia clásica: es utilizada para corregir los excesos que el paciente tenga en los lados del abdomen.
- Abdominoplastia circunferencial: para aquellos pacientes que pierden peso de forma exagerada y les sobra piel.
- Abdominosplastia inversa: el exceso de piel se suele localizar en esta ocasión por encima del ombligo.
Preparación para la abdominoplastia
A continuación te damos algunos consejos antes de someterte a este tipo de cirugía:
- Evita el tabaco, pues en ocasiones la sanación puede ser más lenta.
- Trata de mantener un peso estable los seis meses anteriores a la cirugía.
- Mantén una correcta hidratación de la piel.
- No consumas alimentos o medicamentos que pueden alterar la coagulación de la sangre, al menos 10 días antes.
- Realiza un chequeo antes de la cirugía con el fin de descartar cualquier tipo de hernia.
Riesgos de la abdominoplastia
Los riesgos asociados a este tipo de cirugía son comunes a cualquier tipo de operación:
- Infección
- Hematomas
- Cicatrización anómala
- Riesgos derivados de la anestesia como confusión mental leve o daño en las cuerdas vocales.
Los peligros concretos de la abdominoplastia podemos resumirlos en los siguientes:
- Complicaciones pulmonares o de la cavidad pulmonar. Poco frecuentes.
- Acumulación de líquido
- Pérdida de piel que aumenta el tamaño de las cicatrices.
- Posiciones extrañas en el ombligo.
- Alteraciones en la sensibilidad de la piel.
Con posterioridad a la abdominoplastia
La hospitalización después del paso por el quirófano oscila entre un o dos días para recuperarse.
Durante este periodo le colocarán una protección abdominal. Suele ser una faja.
En ocasiones, en base a los dolores, le suministraremos calmantes los primeros días del procedimiento.
Se suele aconsejar caminar encorvado los primeros días para reducir la tensión de la cicatriz.
Aunque los puntos se quitan pasada la primera semana, recomendamos no hacer deporte hasta unas cuatro semanas después.
Hidratar la piel, ejercicio periódico para fortalecer la zona y evitar fluctuaciones de peso son los últimos consejos que queremos darte.