Lipofilling facial en Madrid

El envejecimiento facial es un proceso natural e inevitable. Se manifiesta, por ejemplo, en la pérdida de volumen en los pómulos, alrededor de los ojos y en otras zonas de la cara. Entonces la piel se descuelga acentuando surcos y arrugas. En definitiva, el rostro aparece envejecido y cansado.  

Por suerte cada vez contamos con técnicas más eficaces para revertir los signos del paso del tiempo. Uno de ellos es el lipofilling facial o lipotransferencia facial, una novedosa técnica para rellenar las zonas de la cara que han perdido volumen.

A diferencia de los rellenos faciales, los efectos del lipofilling son permanentes. Además, cuenta con otra ventaja añadida, y es que se utiliza la propia grasa del paciente, por lo que el proceso es 100% natural. 

En Estética Castro Sierra somos especialistas en lipofilling. Si quieres experimentar los efectos de este innovador tratamiento y recuperar la vitalidad de tu rostro, contacta con nosotros. La primera consulta es gratuita. 

¿Qué es el lipofilling facial?

En el lipofilling el cirujano extrae células grasas del propio paciente y las reinyecta en alguna parte de la cara que necesita ser remodelada o voluminizada. Este procedimiento también se denomina lipoescultura, lipomodelación,  inyección de grasa, transferencia de grasa autógena, injerto de grasa...

EL lipofilling facial permite restaurar los volúmenes y las proporciones de la cara. Debido al envejecimiento, algunas zonas de la cara sufren una pérdida de grasa y las proporciones se invierten. El lipofilling se utiliza para conseguir un equilibrio natural, rellenar las arrugas, difuminar las líneas de expresión, mejorar la calidad de la piel, reconstruir los volúmenes y dar forma al rostro. La grasa tiene una consistencia suave y puede ser moldeada para dar resultados naturales y precisos.

Los resultados son instantáneos. El rostro parece más joven, rejuvenecido.  Las zonas más comunes en las que los pacientes reciben un injerto de grasa en la cara son:

  • Pómulos
  • Ojeras
  • Sienes
  • Labios
  • Pliegues de las comisuras de la boca

Un tratamiento revolucionario

El lipofilling supone una verdadera revolución en el campo de la cirugía estética.  El resultado es natural y permanente sin necesidad de nuevas inyecciones. El método es 100% natural con efectos duraderos al contrario que las inyecciones de relleno como el ácido hialurónico que necesitan renovarse con regularidad para mantener el resultado.

Desde hace 30 años, se han perfeccionado las técnicas de extracción, depuración y reinyección de la grasa. Ahora es una cirugía sencilla, reproducible y fiable.

Ventajas del injerto de grasa autóloga

  • La inyección es 100% natural: el lipofilling se realiza con grasa autóloga recogida en el paciente durante la liposucción.
  • La grasa empleada puede provenir del exceso de grasa de cualquier parte del cuerpo, por lo que se consigue un doble propósito.
  • No se necesitan implantes. Es decir, no se usan cuerpos extraños que el organismo podría rechazar. 
  • El resultado es permanente y evoluciona con el peso corporal. Toda la cara engorda o adelgaza al mismo tiempo. 
  • No queda ninguna cicatriz, o las que quedan son imperceptibles. 
  • Mejora el tono de la piel
  • Se recuperan los volúmenes y la armonía del rostro

En qué consiste la lipotransferencia facial

La lipotransferencia se realiza con anestesia local, anestesia local con sedación o anestesia general dependiendo de las recomendaciones del cirujano y los deseos del paciente. El procedimiento dura entre 30 y 45 minutos.

La intervención comienza con la preparación y el revestimiento de la cara y de la zona en la que se extraerán las células grasas (como el abdomen o las caderas). Se harán marcas en su cara. Se aplican algunas pequeñas inyecciones para adormecer la piel y se inyecta un líquido anestésico bajo la piel. La grasa se extrae con una pequeña cánula, mediante una liposucción convencional (lo que supone una ventaja añadida).

A continuación, la grasa se cuela o se centrifuga, para asegurarse de que sólo se utilizan células grasas enteras y no dañadas. Luego se aíslan las células grasas y las células madre para utilizarlas como relleno en la cara. El último paso es tomar esas células de grasa no dañadas e inyectarlas en las zonas deseadas.

La desventaja del método es que no todas las células grasas trasplantadas sobreviven a este proceso, y se observa una ligera pérdida de volumen en las primeras 6 semanas antes de que la situación se estabilice. La mayoría de los estudios muestran que entre el 30 y el 50% de la grasa inyectada sobrevive. Por lo tanto, en algunos casos es necesaria una segunda intervención. Sin embargo, las células grasas que sobreviven dan un resultado duradero.

Antes y después del lipofilling facial

La transferencia de grasa o lipofilling de la cara es una técnica en la que la propia grasa se extrae de otra parte del cuerpo y se introduce en la cara para restaurar el volumen en zonas clave como parte de un programa de rejuvenecimiento facial. 

La mayoría de los pacientes que se someten a un lipofilling no buscan un cambio radical en su apariencia, sino recuperar el rostro que tenían hace años, de una manera que parezca natural.

Tras la transferencia de grasa se observan cambios inmediatos en la cara del paciente. Pero como ya hemos explicado, no todas las células grasas trasplantadas sobrevivirán. Las células grasas son muy delicadas y en las siguientes semanas las que no sobreviven desaparecerán gradualmente de la cara. Las células de grasa que han sobrevivido son permanentes y se comportan como la grasa ya presente en la cara, envejeciendo al ritmo lento natural. El resultado final es visible unos 3 meses después de la intervención.

Si la cantidad de grasa que ha sobrevivido en una sesión no es suficiente para corregir el área tratada, se puede realizar una segunda sesión. 

Postoperatorio

El lipofilling facial no es un procedimiento doloroso. Si aparece dolor postoperatorio se tratará fácilmente con analgésicos ligeros. Es aconsejable no realizar actividades de gran esfuerzo durante unos días o al menos hasta que la hinchazón se haya asentado. En general, muchos pacientes pueden volver al trabajo en uno o dos días y pueden realizar sus actividades cotidianas al día siguiente del tratamiento.

La hinchazón y los hematomas en la cara y en las zonas donde se ha extraído la grasa, son los efectos secundarios más habituales, pero desaparecen por sí solos en cuestión de días. El cirujano te informará sobre todos los cuidados necesarios después de la operación. 

Lipofilling | Precios

El precio de una lipotransferencia facial varía en función de cada caso. Depende de parámetros como la cantidad de grasa a transferir o los resultados esperados.  

En Estética Castro Sierra estudiamos a fondo tu caso para conseguirte los mejores resultados y ofrecerte un presupuesto adaptado a tus necesidades. Te lo ponemos fácil. Llámanos y solicita tu primera consulta. Es gratis y sin ningún compromiso. 

Preguntas frecuentes

¿Cuánto tiempo dura la inyección de grasa en la cara?

No todas las células grasas sobreviven al proceso de trasplante. Se observa una ligera pérdida de volumen en las primeras 6 semanas antes de que la situación se estabilice. Por ello, en algunos casos es necesaria una segunda intervención. 

Sin embargo, todas las células grasas que sobrevivan 3 meses serán permanentes.

¿Cómo cambia el rostro con la edad?

A medida que envejecemos se producen una serie de cambios en la cara. Estos cambios están influenciados por factores genéticos, la gravedad y el estilo de vida.

La cara y el cuello se apoyan en dos arcos importantes: el primero es un arco de hueso y tejido blando que se extiende desde las sienes, alrededor del ojo y hasta el lado de la nariz. Este arco es importante para sostener las mejillas. El segundo arco es el maxilar inferior, que es importante para sostener la zona inferior de la boca y el cuello. Con el tiempo, el hueso se adelgaza en estas zonas y también se pierde grasa. La piel ya no está tan bien sujeta y las mejillas empiezan a descolgarse hacia delante y hacia abajo, profundizando el pliegue que va desde la nariz hasta la comisura de los labios (pliegue nasolabial). Esta misma migración de la mejilla conduce a la papada que interrumpe la línea de la mandíbula y da al rostro un aspecto rectangular en lugar de una forma almendrada más juvenil. La mejilla también se aleja de la zona del párpado inferior creando un surco entre ambos. La flacidez de los músculos del cuello y la acumulación de grasa bajo la barbilla empiezan a borrar los contornos normales de esta región y el exceso de piel puede desarrollar pliegues, que son antiestéticos y envejecen. Del mismo modo, se desarrollan pliegues y líneas delante de las orejas. Estos cambios también pueden afectar a las personas más jóvenes tras la pérdida de peso en la cara.

¿Con qué otros procedimientos puede combinarse la lipomodelación?

Se puede combinar con un lifting facial si la piel está flácida, con una cirugía de párpados o con cualquier otra cirugía plástica facial.

¿Existen otros tipos de lipotransferencia?

La grasa es un relleno muy valioso con excelentes cualidades y puede utilizarse para rellenar muchas  zonas del cuerpo. Entre los procesos más habituales está el lipofilling mamario, para dar volumen o corregir irregularidades en los pechos.

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